La Palabra Viva

Espíritu Santo es una persona porque cumple las características de ella. Lógicamente, las tres cualidades básicas de la personalidad son: El razonamiento, las emociones y la capacidad de tomar decisiones por sí mismo. Mostremos algunos pasajes que demuestran cada una de estas características en El Espíritu Santo.

 

LA CAPACIDAD DE RAZONAR

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Romanos 8:27,   1 Corintios 2:10-11

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Ahora bien, Dios nos ha revelado esto por medio de su Espíritu, pues el Espíritu lo examina todo, hasta las profundidades de Dios. En efecto, ¿quién conoce los pensamientos del ser humano sino su propio espíritu que está en él? Así mismo, nadie conoce los pensamientos de Dios sino el Espíritu de Dios.

Un breve comentario a estos pasajes. Nadie sin razonamiento es capaz de interceder por alguien. El Espíritu Santo intercede por nosotros. Nadie sin razón ni personalidad conocería los pensamientos de Dios. Es más, nosotros tenemos razón, pero, ni aún así conocemos la mente de Dios. El Espíritu Santo posee una personalidad superior, pues, es divina.

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LAS EMOCIONES DEL ESPÍRITU SANTO

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Isaías 63:10,   Romanos 15:30,   Efesios 4:30

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En estos pasajes vemos la sensibilidad del Espíritu Santo, emociones que sólo una persona es capaz de poseer. No podemos aceptar la idea de la secta de los testigos de Jehová que suponen que el Espíritu nada más es una fuerza.

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LA VOLUNTAD DEL ESPÍRITU

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1ª Corintios. 12:11,   Juan 14:16-17

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Vemos que la repartición de los dones es una acción propia del Espíritu. Alguien sin personalidad es incapaz de decidir, pues, no puede hacerlo. Con estos pasajes hemos demostrado la personalidad del Espíritu Santo. Él es una persona y NO ES una influencia. Bueno, pero, si usted lee la Biblia sin prejuicios ni trampas verá como la escritura siempre se refiere a él como una persona. Es más todas las acciones que la Biblia le atribuye solamente pueden ser ejecutadas por una persona divina.

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Veamos algunas acciones del Espíritu Santo:

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Hablando:      Hechos 8:29,    Apocalipsis 2:7
Enseñando:    Juan 14:26
Eligiendo:      Hechos 13:2(Leer además Hechos 16:6-7, 20:28).
Testificando:  Juan 15:26
Guiando:       Romanos 13:2 (Leer además Gá. 5:18).
Escudriñando: 1 Corintios 2:10
Intercediendo: Romanos 8:26